Un estudio internacional liderado por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) está investigando la consanguinidad en las poblaciones autóctonas del sur de la península ibérica y del noroeste de África, identificando relaciones genéticas compartidas a través del estrecho de Gibraltar que son únicas en esta área geográfica. Según Candela Hernández, investigadora del Departamento de Biodiversidad, Ecología y Evolución de la UCM, este trabajo proporciona los primeros datos, resultados y conclusiones en poblaciones definidas de la península ibérica, destacando los comportamientos socioculturales específicos de las poblaciones ibéricas y bereberes que dejan su huella en el ADN.
El estudio, publicado en Human Genetics, ha analizado las regiones de homocigosidad, causadas por la consanguinidad, en los genomas de los individuos estudiados. Se ha observado que estas regiones se concentran en «puntos calientes» simultáneamente en las poblaciones de ambos lados del Estrecho, destacando genes relacionados con la respuesta inmunitaria y la percepción olfativa en estas áreas. Según la investigadora de la UCM, las migraciones y la selección natural han jugado un papel importante en la mantenimiento de la homocigosidad en estas regiones genómicas en el Mediterráneo occidental.
En colaboración con el Instituto de Salud Carlos III y instituciones portuguesas y francesas, se han analizado 139 individuos mediante barridos genómicos masivos que examinan alrededor de 2 millones de marcadores genéticos. Este tipo de investigaciones permiten rastrear las interrelaciones entre patrones socioculturales, como la elección de pareja, y sus potenciales costos biológicos, con relevancia clave en el contexto biomédico.
El estudio destaca la importancia de aplicar estas metodologías y enfoques a otras regiones de la península ibérica para ampliar el conocimiento sobre la diversidad genética de las poblaciones actuales y su impacto en la salud humana.




